Un sueño, solo eso

Estamos aquí, en el frente del escenario, cubiertas por maquillaje, y un antifaz… Nos entregamos en cuerpo y alma al arte de la seducción, el coqueteo. Vendemos nuestras almas a cambio de un inmenso reconocimiento, joyas, vestuarios, y atenciones, nos desvivimos para hacer nuestro arte más perfecto cada día, somos mujeres prohibidas, geishas contemporáneas, plebeyas convertidas en princesas por un solo momento de la noche, poesía transformada en una bella canción, cuyos movimientos son nuestra vida, cortesanas modernas, submundo trastornado, fuera de la sociedad…
¿Quienes somos? Cualquier persona, una cantante de jazz una noche, una dama sofisticada la siguiente, y tres días después una geisha. Alguien, nadie, CUALQUIERA.
¿Qué somos? Solamente un sofisticado entretenimiento, pero en sí, mujeres que hace años perdimos nuestro rostro, y nos disfrazamos en el anonimato de joyas, perfumes y egocentrismo, vana y joven diversión.
¿Qué hacemos? Ser lo que los clientes deseen, siempre con una sonrisa en los labios, y ojos seductores, pero sin olvidar lo que hacemos, y nuestra perfección.
¿Cuál es nuestra misión? Ser producto casi de tráfico, vender nuestras sonrisas y caras bonitas al mejor postor, tratar de elevar siempre nuestro precio, ser un diamante atractivo a los ojos de cualquiera.¿Cuál es el nombre que las personas nos dan? Vedette.


Un eterno sueño, donde caes y caes, nunca sabes lo que sucederá después, lo único seguro es la realidad al despertar

Este cabaret es un sueño que desearía jamas se terminara...